El Poni más pequeño del mundo
Hermosos, inteligentes y amables y están presentes en los sueños de muchos niños: Son los Ponis, equinos de menos de un metro 47 cms de estatura y unos 100 kilos de peso en su edad adulta. Y si bien ya son pequeños, hay otros más diminutos aún, los ponis Shetland, que miden entre 70 y 106 cms en promedio.
Los ponis son uno de los cuatro tipos principales de caballos primitivos de Eurasia, el continente conformado por Europa y Asia. Y el Shetland es una de las más de 55 razas existentes, muchas de ellas provenientes de Europa Occidental. Todos ellos se caracterizan por ser extremadamente tercos y poseer un fuerte carácter, por lo que la doma exige conocimiento profesional para reeducarlos. Una vez domesticados, se caracterizan por ser dóciles, cariñosos y tranquilos, lo que los hace aptos y muy valorados en el entrenamiento de niños que inician su aprendizaje en la equitación.
Otras características del Poni Shetland son similares a las del enanismo: cabeza grande, espalda y cintura largas junto a piernas cortas. Hay dos variantes en estos ponis, el Shetland Original y el Shetland Miniatura o Mini-Shetland que no supera los 87 cms de alzada. También se diferencian en la forma: unos con mucho hueso y cabeza alargada y otros de líneas más finas con cabeza pequeña y cola de porte alto, que los hace muy distinguidos. Ambos tipos poseen orejas pequeñas y puntiagudas, frente ancha, grandes y vivos ojos, además de un pecho ancho y fuerte, lo que los hace muy resistentes y aptos para labores de tiro y monta de adultos.
Sobre los cuidados, el Shetland, como todos los ponis, requiere desparasitación y vacunas cada 2 o 3 meses al igual que los perros y los gatos. Esto es muy importante y debe ser supervisado por un veterinario experto en cuidado equino.
Aunque su tamaño es pequeño, para su crianza se requiere una cuadra de 3 metros cuadrados como mínimo para alojamiento y un corral de ejercicios amplio para que pueda correr libremente, ejercitar sus músculos y evitar el estrés.
Y la alimentación debe incluir nutrientes energéticos presentes en el maíz, la cebada o la avena, además de alimentos ricos en fibras como el heno. La cantidad de de alimento diario debe ser calculada por un médico veterinario de acuerdo a la edad del poni y la época del año, si es fría o de calor. Y, para regalonearlo, con una fruta o zanahorias te ganarás su corazón.
